Aunque he nacido y he vivido casi toda mi vida en Barcelona nunca había entrado en la tienda de Tot-Hom. Imperdonable. Ahora me arrepiento. Hace unas semanas me colé en un universo donde la elegancia reina y el estilo predomina. Durante unas horas, pude ver su taller y su tienda con sus vestidos de novia y de fiesta y sobre todo empaparme de su inconfundible sello.
En Tot-Hom no hay dos novias iguales pero todas tienen algo en común «defienden el vestido como si lo hubieran llevado cientos de veces antes» me cuenta Andrea, la hija de Marta Rota, la artífice de este gran despliegue de moda. Me dice que es un día para pisar fuerte y por eso es mejor no hacer probaturas. Razón no le falta.
Artesanía. Es, además de la elegancia, el otro denominador común de los vestidos que salen de este taller. Todas y cada una de las piezas y bordados están hechos a mano. Una novia Tot-Hom ha de saber valorar todo este proceso artesanal y entiender el por qué de las cuatro pruebas que se llegan a realizar para elaborar su vestido.
«Cuando uno se casa quiere que todo sea perfecto, es la ilusión de la familia entera» me cuenta Andrea. Por ello, alguien del equipo acompaña a la novia en todas las pruebas y acude a su casa a ayudarle a vestirse. Nada está dejado al azar, no hay sorpresas de última hora de cómo y a qué altura poner el velo o de cómo colocar bien el vestido.
Esta torerita joya me encandiló.
El rincón para las novias ocupa el lugar más especial de la tienda. Renovado hace 2 años, el saloncito de pruebas de vestido es muy acogedor.
El taller es inmenso, incluso abruma cuando cruzas la puerta de entrada. La verdad es que es realmente genial ver las cocinas de los diseñadores. Ya me pasó con Caprile, me gustó ver el proceso de creación de los vestidos y ver las personas (y las horas) que hay detrás de cada modelo.
Y es que si hay algo que me sorprende es que una misma costurera es la que empieza y termina un vestido. Son piezas tan únicas que las firman unas solas manos en todo el proceso
Me encantó este collage o Pinterest offline, como les llamo yo, que preside su estudio y área de trabajo. Pura inspiración.
Tot-Hom está en Barcelona y en Madrid aunque Novias sólo se hacen en Barcelona, al menos de momento.
10 Comentarios
Muchas Gracias América! tu punto de vista es muy elegante, lo apreciamos mucho!!! Ya sabes que puedes visitarnos cuando quieras 🙂 Un abrazo.
Gracias a vosotras por vuestro trabajo!
Son geniales estos post! Ver los entresijos de marcas tan especiales! Nos encanta!!
gracias!! Me alegro que os gusten
Son increíbles!
Mi madre, mi hermana y mi tía se hicieron los vestidos para mi boda en Tot-hom! Estaban increíbles, y aunque parece que sea una casa sobria, no podían estar más juveniles! Sólo tengo ganas de «robárselos» para algún sarao mío 😉
Cómo está mini América?
oohh Margaux, cuanto te entiendo! son todos, como bien dices, para «robarlos»!!! Miniame está que te la comes.. de verdad! te mando email con fotito!! 😉
¡Qué bonito el post América!. GRACIAS,
La verdad es que tengo la suerte de tener prendas de ellas y son eternas.
Me llevaron unas amigas mías, clientas suyas y me impactó todo de ellas. ¡no había nada que no me hubiese llevado!
Unas artistas de la aguja y del diseño.
Cuando bajo en moto por Balmes no hay vez que no gire la cabeza para ver aunque sea rápido la tonalidad de las prendas del escaparate….y más ahora que están al 30%.
¡qué suerte ver por dentro el taller!
Es una vergüenza pero yo tampoco tenia constancia…! Se tiene que solucionar por que lo que veo me encanta….!
Gràcies América por este post…!
A mi me encanta Tot-Hom, hacen trajes súper especiales!
[…] De este me ha encantado también la parte de delante. Una auténtica joya, hecha a mano, como todos los vestidos de la firma, algo que pude comprobar cuando estuve en su taller y que os conté aquí. […]